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En Faunia estamos de enhorabuena por el nacimiento, por primera vez en la historia del parque, de 5 crías de monstruo de Gila (Heloderma suspectum), en nuestro pabellón Veneno. Todo un hito para la conservación de esta especie, que se encuentra cerca de la extinción por diversas amenazas como la destrucción de su hábitat natural (que se extiende entre el suroeste de EEUU y el noroeste de México) por la construcción de carreteras y la expansión de la agricultura.
Nuestros compañeros de Veneno, el pabellón donde se encuentra este reptil, se han enfrentado a un reto para lograr su reproducción. La principal complicación radica en la necesidad de recrear, en cautividad, un gran descenso de la temperatura ambiental durante los meses de invierno. En este periodo, los ejemplares permanecen en estado de letargo, por lo que apenas se mueven, excepto para beber agua.
La época de reproducción se da en primavera, entre los meses de marzo (hacia finales de mes) y mayo. Nuestras dos hembras (que habitan en las zonas interiores del pabellón de Veneno) pusieron huevos entre el pasado 26 de junio y el 9 de julio. La media de huevos por puesta varía entre los 4-7 huevos, pero finalmente, sólo 5 de los 12 huevos que pusieron nuestras hembras fueron fértiles. Normalmente, en hembras primerizas el número de huevos fértiles en la primera puesta es bajo.
Las 5 crías permanecerán las primeras semanas en zonas interiores, de manera que no se encontrarán expuestas de cara al público. Durante estas primeras semanas, se les proporcionará una alimentación basada en crías de ratón, pequeños trozos de pollo y huevo batido.
Mientras tanto, puedes acercarte al pabellón de Veneno para ver a nuestro macho reproductor, que se encuentra en su instalación habitual, situada en la zona del mapa.