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El Tarro Blanco es un pato grande que supera en tamaño al Ánade real, aunque es más pequeño que los gansos; de hecho, se considera un ave intermedia entre el pato y el ganso. Se distribuye por estuarios, costas y humedales de agua dulce en África, Asia y Europa. Las hembras pesan algo menos que los machos, que presentan características especiales: colores más definidos y un pico rojo con una prominencia del mismo tono que parece un chichón. La parte superior del cuello es verde oscuro, mientras que el resto del cuerpo es blanco, con una franja pectoral de color castaño y plumaje negro en las escápulas, las rémiges, la punta de la cola y la línea del vientre. Durante la época de la muda no puede volar (ésta dura alrededor de cuatro semanas).
La alimentación del Tarro blanco consiste de moluscos y se complementa con pequeños peces, insectos y otros invertebrados.
Suelen anidar en lugares retirados, y repetir lugar de anidación con respecto al año anterior. La hembra anida en cuevas de conejos, hoyos de paja apilada, árboles huecos y otros lugares recónditos. El nido se forra con plumones. La nidada consiste en nueve o 12 huevos (se han llegado a encontrar nidos con medio centenar), y la incubación dura alrededor de un mes. Mientras que el padre se mantiene cerca del nido, la madre incuba los huevos. La mayoría de las parejas abandonan la nidada para mudar las plumas antes de que las crías se desarrollen completamente (en Europa, esto sucede en julio). Los pollos, entretanto, quedan al cuidado de algunas hembras en las llamadas guarderías.